Los miomas uterinos son tumores benignos formados a partir de las células del musculo liso del útero, que son favorecidas por las secreciones hormonales de la mujer. La progesterona y los estrógenos son dos factores importantes y está comprobado que un tratamiento de reducción de hormonas disminuye en un 50% el tamaño de los miomas.

Cerca del 40% de las mujeres tiene miomas, aunque la mayoría no produce síntomas por lo que muchas no saben que los tienen. Su incidencia aumenta hasta llegar a la menopausia. En ese momento, al reducirse la carga hormonal, desciende la posibilidad de que aparezcan.

Pueden desarrollarse dentro de la cavidad uterina, en el interior de la pared muscular del útero o en la superficie externa del órgano.

La miomectomía es una intervención en la que se proceden a extirpar los miomas uterinos sin necesidad de quitar el útero completo. Puede ser abdominal, histeroscópica o laparoscópica. La cirugía laparoscópica es una intervención con una duración mayor, pero menos invasiva y con una mejor recuperación postoperatoria. Consiste en la realización de pequeñas incisiones a la altura del ombligo, una para meter la cámara y las otras para el instrumental. Mediante un gas se expande la zona abdominal para que el cirujano pueda trabajar mejor. Los miomas se extraen por vía vaginal.

Qué incluye el servicio:

  • Preoperatorio. 
  • Quirófano completo, medicación, monitorización y el material necesario para llevar a cabo la intervención.
  • Equipo médico y servicio de enfermería.
  • Sala de recuperación.
  • Hasta 1 día de hospitalización en planta.
  • Consulta de revisión posterior.

 

Qué no incluye el servicio:

  • Prueba del Covid19 - PCR (si el centro la solicitara para realizar la intervención)
  • Anatomía patológica, si precisa.
  • Otros servicios no descritos.

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